El cerdo ibérico

El cerdo ibérico

Existen multitud de razas en el mundo de la especie porcina, el Cerdo Ibérico es la raza autóctona de la península Ibérica. La raza ibérica brinda productos cárnicos con valores nutricionales excepcionales. La grasa del cerdo ibérico, se incrusta en la musculatura lo que produce una carne más jugosa.

Los cerdos de raza ibérica están perfectamente adaptados al ecosistema en el que viven la dehesa. Es un cerdo más armónico que otras razas o variedades de cerdos, tienen el hocico largo y recto y un esqueleto fino. Aunque tradicionalmente se les conoce como pata negra, no es una denominación idónea ya que ya que existen variedades de cerdo ibérico que no son negros, y cerdos no ibéricos con pelaje negro o muy oscuro.

Según la alimentación que reciba a lo largo de su vida y el tipo de crianza existen diferentes calificaciones de Cerdo Ibérico. Existen tres calidades según su alimentación y método de crianza.

Los cerdos ibéricos pasan por diferentes fases de alimentación y cuando llegan a la fase final, en la que el cerdo alcanzará 15 arrobas de peso, en función de la alimentación que reciba determinará la calidad del producto final, como Ibérico de Cebo si el animal se alimenta de piensos o Ibérico de Bellota si la alimentación la hace en montanera.

 

Bellota: Cerdos ibéricos que han sido alimentados, durante la época de la montanera de octubre hasta a marzo, de bellotas que caen de las encinas y alcornoques en las dehesas, llegando a comer de 6-10 kilos diarios de bellotas. Una vez termina el periodo de montanera, si el animal ha alcanzado el peso, pasará a clasificarse como ibérico de bellota en el momento de sacrificarlo con un mínimo de 14 meses.

Cada animal es identificado y está sometido a una estricta supervisión veterinaria, con una alimentación equilibrada y recibe los nutrientes necesarios y adecuados a cada etapa de crecimiento.

En nuestros cebaderos los cerdos crecen bajo el control del equipo veterinario, que sigue la evolución de cada cerdo hasta que alcanza el peso óptimo. Tras una rigurosa selección, se les prepara para su expedición.

Los piensos que integran la dieta tienen elevado porcentaje de cereales, soja como suministro proteico y complementos vitamínicos y minerales que garantizan el crecimiento saludable de los animales.

Prohibición tratamientos medicamentosos en pienso, en el mes anterior al sacrificio del animal.